En estos años dominados por la crisis y otros problemas salariales, ante la falta de Universidades Públicas que impartieran Comunicación Audiovisual no me quedó más remedio que ir a Universidad Pontificia de Salamanca.
Antes de llegar me esperaba la típica clase llena de niños ricos medio gilipollas (algo que creo que hemos pensado la mayoría), y me encontré con una clase de chicos gilipollas, pero sin ser ricos jajaja.
No... la mayoría de ellos estaban allí por motivos como el mío y eran gente totalmente normal, aunque todos tenían un defecto: creer que Zamora era peor que Salamanca, una imagen que he intentado contrarrestrar con mi presencia allí (¿a que sí Devi?).
Y los meses fueron pasando, demasiado rápido par mi gusto, y a la vez que con la gente con la que al principio no hablaba demasiado (tener que ir y venir todos los días tiene el contra de que no conoces a la gente tanto como quieres), y que moverse por la facultad cada vez era más fácil, iban surgiendo tímidos lazos de amistad con la gran parte de los del turno de la tarde, y con algunos de la mañana en el segundo cuatrimestre, ya que a interpersonal iba por las mañanas gracias a mi eterna excusa (pero cierta) de mis ensayos de teatro.
Llego un buen/mal día en el que me enteré que la Universidad de Salamanca, con este invento de Bolonia, iba a empezar a dar Comunicación Audiovisual en la Universidad Pública. NO me lo pensé dos veces, pero no fue por vosotros ni mucho menos, si no por mis padres, que no me parece justo que se tengan que estar partiendo el lomo día a día si yo puedo estudiar mucho más barato, auqnue ello suponga repetir un año.
Tan sólo espero que por que me vaya (que alomejor no, porque no me aceptan) no deje de hablar con vosotros vía tuenti, y quien sabe, en un futuro compartir piso con alguno de vosotros. También me podéis visitar a mi eh? XD
y ya sin más dilación, un inmenso abrazo/beso a todos, porque siempre los primeros años se recuerdan a lo grande, y este ha sido digno de recordar. Hasta siempre!
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